21.10.11

Tranquilos, solo vengo de paso...

El título de este post es algo que me gustaría decirle a muchas amistades. Pues apenas he pasado un cuarto de siglo y ya he tenido tantos(as) "best friends forever". ¿y esto qué significa?
Durante mucho tiempo pensé y traté de enjuiciarme, si era bueno o malo, nunca le he dado seguimiento a muchas amistades, no recuerdo o conozco actualmente a nadie de mi primaria, secundaria o preparatoria (y hasta parece que tampoco de la universidad). Por mucho tiempo pensé que eso era una señal, una mala señal, de un desapego mal pedo malvibroso de mi parte porque veo a tanta gente que dice "fuimos juntos en el kinder" y ahora se toman unas chelas. Y pues hasta las series de TV indican otra cosa. Entonces te invade la creencia de que has ido en contra del universo y eres un ser anormal. (Pero la normalidad es simplemente estar en la norma o promedio.)
Pasé casi un cuarto de siglo con ese pensamiento, consternado, sintiéndome un mal amigo, un culero que se salía de los grupitos de amigos. Y poco a poco creo que he entendido las cosas de otro modo.
Habiendo discutido con algunas personas al respecto, caí en cuenta de que todas esas veces en las que salimos de ciertos círculos de amistades es porque evolucionamos y dejamos de pertenecer a ellos. Considerando una idea poderosa, para que alguien esté en contra de algo generalmente necesita conocer a alguien que esté a favor, porque en las relaciones sociales que entablamos buscamos que afirmen quienes somos, entonces buscamos rodearnos de personas como nosotros o diferentes a nosotros que nos den esa seguridad. ¿No creen? Analicen sus amistades.
Bajo esta premisa, concluyo que las amistades muchas veces son relaciones de conveniencia, y ambas partes ganan algo. Empatía, poder, influencias, consejos, dinero, personas para compartir, alguien para charlar de música, videojuegos, Twitter, etc, etc.
Desafortunadamente no todas las relaciones son sanas, a veces hay amistades perversas sin pensarlo que se dedican a chingar a veces se tiran al piso para que siempre vaya uno a darles ánimos. A veces nada más quieren que les busques después de la peda y vayas ya que están en los separos o chocaron el coche. Pero bueno, para rodearse de gente así hay que ser una persona que busca ayudar a todos y espera que le paguen con la misma moneda o encuentran una satisfacción en decir "yo le salvé la vida, lo saqué de el hoyo donde estaba", ahí esas personas también son culpables de rodearse de gente así.
Pero también hay relaciones más saludables, pues algunos de mis mejores amigos serán para mi una muestra de ello. Y sin embargo, también uno puede cambiar y perder contacto, no de una mala manera, sino simplemente, te mudas, cambias de ideas, de religión, de pareja, de trabajo, te casas, y ya, las relaciones evolucionan, los intereses cambian y esas personas no refuerzan quienes somos y nosotros no reforzamos quienes son. Inevitable e ineludible.
Así que cambiar de amistades, dejar ir algunas, cambiar de círculos, dejar de felicitar gente en su cumpleaños, olvidar nombres, etc. etc., todo eso es algo que puede pasar, y no es ni bueno o malo, simplemente así es la vida.
Por eso mismo intento mantener aunque sea un poco de contacto con esas personas que todavía quiero y han sido parte importante de mi vida (a veces me falta tiempo, pero creo que esas personas me ayudan y ponen de su parte), aunque sea preguntar ¿qué has hecho con tu vida?, porque uno nunca sabe cuando vuelve a ver a esos amigos que te recuerdan de donde vienes y a donde ibas. Y pues con las personas que no son tan importantes o se vuelven intrascendentales, igual y han notado que hace mucho les dejé de hablar y no les he vuelto a buscar (o ellos a mí), así es la vida, si ustedes no hacen nada por buscar ese contacto, yo menos. Y esto jamás nos deja solos, simplemente nos da los amigos justos y necesarios, los demás solo serán conocidos.


Esa es mi conclusión, así que tranquilos, solo vengo de paso... pero eso sí, ni se les ocurra desaparecerse y buscarme solo porque se les ofrece algo (pinches convenencieros). Así no son mis amigos.